Un hecho insólito tuvo lugar este fin de semana en la Comisaría 35 de Rincón de los Sauces cuándo un cura párroco llegó con elementos para ingresar elementos para un interno. En el control de los mismos se detectaron 43 gramos de marihuana y 10 papelillos para armar.

«Un cura párroco llegó con intenciones de ingresar elementos para los internos. A pesar de tratarse de una persona de confianza se controlaron los elementos protocolarmente y adentro de un pote de dulce de leche se encontró una bolsa de nylon que ocultaba 43 gramos de cannabis sativa y 10 papelillos», explicó el comisario Claudio Vinet en diálogo con Todo se sabe en Radio 7.

El comisario indicó que, la defensa del párroco fue que «un familiar de un interno se lo entregó y pidió que se lo acerque a la comisaría».