El obispo de la diócesis de Neuquén, Monseñor Fernando Croxatto, expresó su preocupación por hechos de violencia de género y de toda índole conocidos en los últimos tiempos en escuelas, hospitales y en las calles y lo atribuyó a la falta de recursos básicos, de proyectos motivadores y de una ideología individualista.
En relación a la violencia en la sociedad, Croxatto reconoció que es una realidad que se ve permanentemente y dijo que “Va a ser difícil erradicar la violencia si no tenemos un ideal, una meta; cuando uno vive como en un vacío interior y no hay un proyecto o una mirada de poder alcanzar algo a futuro, eso genera interiormente violencia, el sin sentido genera una violencia natural”, afirmó.
El Obispo además, dio el ejemplo de una familia y dijo “Imagínate que se levantan cada mañana, no tienen trabajo, tienen varios hijos y tienen que pensar que comer, no tienen lo mínimo, ni agua tiene en la casa, ya está generando violencia adentro, lo toco y salta, y bueno, esa esa realidad que está ahí afuera”, explicó.
Por último, el líder católico repudió las ideologías individualistas y afirmó que “Cuando yo soy el centro de la realidad y no tengo otra meta más allá de mí, es muy fácil que se destape la intolerancia y la violencia. Hay ideologías que en vez de favorecer el crecimiento y la madurez humana, fomentan el individualismo, y también son generadoras de violencia”, apuntó.