Durante un procedimiento de control en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, agentes especializados de la Dirección General de Aduanas-AFIP encontraron una insólita cantidad de mercadería de un pasajero que arribaba en un vuelo proveniente de Lima, Perú.
El análisis de información anticipada fue fundamental para el procedimiento: buscando una mejor gestión de riesgo, emitió una alerta que le permitió a la Aduana prever la llegada de pasajeros que podían ameritar verificaciones exhaustivas -el hombre en cuestión ingresaba al país con cuatro valijas-.
En efecto, el viajero traía 302 prendas deportivas nuevas y originales: había camisetas de fútbol de la Selección argentina, Brasil, Polonia y Barcelona.
Teniendo en cuenta que el precio de las mismas suele rondar los 20 mil pesos por unidad, el valor total de la mercadería podría superar los 6 millones de pesos.
Así, dada su cantidad y variedad, se presume que los productos fueron traídos con fines comerciales.
En ese marco, la maniobra constituye una infracción al régimen de equipaje en los términos del artículo 977 del Código Aduanero, por lo cual, a la espera de la decisión del tribunal administrativo, la Aduana secuestró la mercadería. Al viajero podría caberle una multa de 18 millones de pesos.