La Ruta Nacional 237 fue testigo de una tragedia este domingo, cuando el oficial subinspector Enzo Gabriel Zúñiga perdió la vida tras ser arrollado por un vehículo. El accidente ocurrió en el kilómetro 1471, mientras Zúñiga participaba en un operativo tras un siniestro previo.
Los primeros informes indican que el impacto del Renault Sandero contra el uniformado se produjo a más de 25 metros de la cinta asfáltica. Las autoridades locales están investigando las circunstancias que llevaron a la conductora del utilitario a perder el control del vehículo. Otro hombre, quien era un testigo del accidente previo, resultó herido.
El comisario inspector Gustavo Muñoz, coordinador de la Zona Sur, relató en una entrevista con radio 7 que el Sandero recorrió al menos 40 metros desde que su conductora perdió el control. “Se están realizando pericias para determinar por qué el vehículo se desvió de la ruta y colisionó con los involucrados en el operativo policial”, señaló Muñoz.
Zúñiga, quien se encontraba en la fase final de su turno, estaba esperando la llegada de grúas para retirar dos vehículos que habían estado involucrados en un accidente anterior. En ese momento, el Sandero apareció a gran velocidad, sin que el oficial y sus compañeros pudieran reaccionar a tiempo.
La conductora del Renault, una mujer de 62 años, sufrió lesiones que no revisten gravedad y fue trasladada a un hospital para su atención. La policía ha asegurado que se están llevando a cabo todas las diligencias necesarias para esclarecer los hechos.
En un comunicado emitido por la fuerza policial, se lamentó profundamente la pérdida de Zúñiga, destacando su dedicación al servicio. “Su vida se vio trágicamente interrumpida, dejando un vacío irreparable en su familia, compañeros y la comunidad”, señala el texto, donde se envían condolencias a sus seres queridos.
Los detalles sobre la dinámica del accidente son objeto de investigación. Las autoridades buscan respuestas sobre la velocidad y el comportamiento de la conductora antes del trágico desenlace. La policía ha solicitado a testigos que se presenten y brinden información adicional.
La congoja en el ámbito policial es palpable. La cúpula de la institución ha expresado su dolor y ha destacado la importancia de la seguridad en las rutas, especialmente en operativos como el que se llevaba a cabo en el momento del accidente.
El comisario Muñoz enfatizó que, a pesar de la tragedia, los efectivos continuaron trabajando para garantizar la seguridad en la zona. Sin embargo, este hecho insólito resalta la necesidad de una mayor atención y precaución en las carreteras, tanto por parte de conductores como de las autoridades.
Las investigaciones siguen su curso, y se espera que pronto se obtengan más respuestas sobre las causas que llevaron a esta tragedia en la Ruta 237. La comunidad de Junín de los Andes se une en duelo por la pérdida de un servidor público comprometido.