Cuando los profesionales de la salud diagnostican “prediabetes” significa que la persona tiene un nivel de azúcar en sangre que es superior al que se recomienda como límite saludable. Sin embargo, ese nivel de azúcar no es lo suficientemente alto como para clasificarlo como diabetes de tipo 2.
Un grupo de investigadores de Perú realizó una revisión sistemática de 25 estudios y reveló que el 24% de la población de América Latina tiene prediabetes.
Un porcentaje alto que compromete la salud pública porque el trastorno pone a la población en mayor riesgo de tener diabetes y diversas enfermedades metabólicas y cardiovasculares.
Esos estudios se publicaron entre 1992 y 2023 y abarcaron más de tres décadas de investigación sobre la prediabetes en nueve países: Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Perú, República Dominicana y Venezuela.
Los resultados del trabajo, que fue publicado en la revista Journal of Diabetes & Metabolic Disorders, sirven para visibilizar un importante desafío de la salud pública.
Los autores, que son investigadores del Instituto de Investigación de Enfermedades Tropicales y a la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Toribio Rodríguez de Mendoza de Amazonas y la Universidad Continental Lima, recomendaron que se deberían estandarizar los criterios para hacer el diagnóstico y los métodos de detección para que los datos se puedan comparar mejor y se desarrollen estrategias preventivas.
También su propuesta sería útil para fortalecer los sistemas de vigilancia epidemiológica, para mitigar la creciente carga de la prediabetes y su progresión a la diabetes.
En la región, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), 112 millones de adultos (de 18 años o más) viven con diabetes, una cifra que representa al 13% de la población adulta.
Qué es la prediabetes y por qué crece en América Latina
La prediabetes es como un estado intermedio de hiperglucemia. De acuerdo con la Federación Internacional de Diabetes y la Organización Mundial de la Salud, se trata de un estado que incluye alteraciones específicas en los niveles de glucosa en sangre.
Los investigadores de Perú precisaron que los “factores como la urbanización, las transiciones dietéticas y las desigualdades en el acceso a la atención sanitaria podrían contribuir a patrones de prevalencia distintos” en esta región.
Además, señalaron que la limitada representación de la región en estudios globales impide comprender plenamente la magnitud del problema y dificulta la implementación de estrategias adecuadas de prevención y manejo.
Mencionaron que “la prevalencia de la prediabetes en América Latina es comparable con la de otras regiones del mundo, aunque ligeramente menor que en países desarrollados como Estados Unidos, donde se estima una prevalencia del 38%”.
Sin embargo, advierten que las variaciones en prevalencia no solo reflejan diferencias poblacionales, sino también “cambios en los criterios diagnósticos, la evolución de las prácticas de detección y la mayor conciencia sobre la prediabetes”.
Hicieron una advertencia: la prediabetes podría impactar sobre los sistemas de salud en la región. “Si no se aborda adecuadamente, esa alta prevalencia podría traducirse en un aumento significativo de casos de diabetes tipo 2, con complicaciones micro y macrovasculares asociadas”, escribieron.