Tras robarle el bolso a una mujer embarazada, el 22 de marzo de 2014 David Moreira, de 18 años, intentó escapar en moto junto con un cómplice por las calles de Rosario cuando cuando una camioneta los impactó por atrás y ambos se cayeron del vehículo.
El acompañante escapó corriendo. En cambio, Moreira fue atrapado por un grupo de vecinos que escucharon los gritos de la víctima.
Decenas de personas lo retuvieron y comenzaron a pegarle, en un linchamiento que duró unos 15 minutos.
Luego de una hora llegó la ambulancia al lugar que trasladó al joven con traumatismos de cráneo y pérdida de masa encefálica al hospital, donde murió tres días después.
A partir de allí comenzó una investigación con videos y testimonios para detener a quienes golpearon y asesinaron a golpes al ladrón.
Finalmente identificaron a tres de los vecinos. Uno de ellos acordó con la Fiscalía en un jucio abreviado en septiembre de 2019 una pena condicional de tres años, por lo que siguió en libertad.
Para los otros dos continuó el proceso. Luego de tres suspensiones del juicio, se puso fecha para julio de este año.
«Mi hijo no era un perro»
Tras el asesinato de David, la familia se mudó a Uruguay. En su último regreso a Rosario por cuestones de la causa, su madre, Lorena Torres, habló con La Capital y se refirió a su presencia en el juicio.
«Me gustaría pero sé que va a ser muy duro. Me voy a encontrar con cosas muy fuertes que espero tener la fortaleza para soportarlas», indicó.
«Con respecto a las veces que se suspendió el juicio, primero fue entendible porque era época de pandemia. Pero ya después no sé por qué se suspendió tantas veces», cuestionó la mujer.
En ese sentido, expresó: «Parece que la Justicia no es para todos igual, al menos yo pienso eso con todo lo que he vivido, por los años que pasaron y todavía sigo esperando».
«De parte de la Justicia nunca tuvimos una respuesta, espero que esta vez respondan con una condena justa», reclamó Lorena.
Y añadió: «Creo que matar a una persona como mataron a David es algo grave y la Justicia no lo tomó de esa manera. Ya hubo una condena con prisión condicional y yo pienso que una persona que mata a otra tiene que tener una condena en la cárcel».
«Espero que todo esto sea para bien y sirva de ejemplo, pera que no pase nunca más. Nadie tiene derecho de juzgar a nadie y menos a tomar justicia por sus propias manos a tal punto de llegar a matar a otra persona», señaló la mamá del joven.
«No fue justo lo que hicieron; mi hijo no era un perro, era una persona que cometió un error y que condenaron y mataron de la misma manera que nos condenaron a nosotros. Lo único que espero es que la Justicia castigue a los culpables, porque hasta ahora caminan por la calle como cualquiera de nosotros», señaló en declaraciones que reproduce TN.