En el tramo final de la campaña, la candidata a presidente de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, apuesta todo a conquistar un ticket en el balotaje que le garantice una posibilidad más para pelear por la administración del país. En ese camino, trabaja para alinear la tropa completa del PRO detrás de su figura.
Luego de haber logrado la foto de unidad con el diputado Diego Santilli, y a posterior, con Horacio Rodríguez Larreta, su rival en la PASO, sumará a la diputada y exgobernadora María Eugenia Vidal a su recorrida por el interior del país.
Lo hará la semana próxima, en la ciudad costera de Mar de Plata, bajo la misma modalidad: compartirán viaje en el motorhome apodado «La Patoneta», con intenciones de completar así con el mapa de los referentes del espacio que se plegaron al ala moderada del espacio en la interna.
La visita a la ciudad balnearia se enmarcará en la celebración del Coloquio de IDEA que se realizará del 4 al 6 de octubre, en el que Bullrich expondrá en la segunda jornada de la edición, y apunta a consolidar la unidad del espacio ante un electorado que pasó factura por la tensión.
Desde el 13 de agosto y luego de haber expresado su apoyo a Larreta, Vidal se manifiesta en consonancia y trabaja en pos de torcer la elección en favor de la principal coalición opositora. En los últimos días protagonizó actividades en Entre Ríos y se prepara para visitar Córdoba y Santa Fe.
Además, estableció acompañar a Jorge Macri, aspirante a jefe de Gobierno porteño, una vez a la semana en actividades de campaña.
Las duras críticas y el malestar del entorno que rodean a la titular del PRO en uso de licencia, incluso las apuntadas por el propio Cristian Ritondo -de estrecho vínculo con la legisladora-, luego de que Vidal apoyara a Rodríguez Larreta en la interna parecen haber quedado atrás.
A poco menos de un mes para las generales del 22 de octubre, la aspirante presidencial recorre el país e intenta mostrarse con la tropa completa del PRO detrás de su figura, incluso a quienes apuntó con dureza en la contienda por la representatividad de Juntos por el Cambio.
Lo propio hizo el pasado lunes en Jujuy, junto al gobernador, Gerardo Morales, quien compitió como precandidato a vicepresidente del jefe de Gobierno porteño y había participado de un acto con el ministro de Economía y candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, en Salta el día anterior a su visita.
Si bien un sector del larretismo asegura que no se siente parte de la estrategia planteada por la aspirante presidencial, postura respaldada por los socios de la coalición como la UCR y la Coalición Cívica – ARI, otras expresiones del espacio consideran que no se trata de un problema de inclusión sino una diferencia en la forma de hacer campaña.
«Hay una integración absoluta en los equipos. Lo que es diferente es el estilo de hacer campaña, que es muy distinto. El Larretimos hacía campaña larretista, es decir, de forma muy ordenada, prolija y con todo medido. Es el modelo de Horacio», aseguró una fuente cercana al jefe de Gobierno porteño que participa de los equipos técnicos que ahora responden al liderazgo de la exministra de Seguridad.
En la misma línea, aclaró: «La campaña de Patricia es más tradicional, más autogestiva. Cada uno hace lo que cree que debe hacer sin tanta indicación».
Con intenciones de bajar la tensión, enfatizó en que todos los funcionarios y referentes de Juntos por el Cambio conforman equipos con ansias de gobernar y que, bajo el liderazgo de Patricia, las cuatro fundaciones incluida la del candidato a ministro de Economía, Carlos Melconian, trabajan de forma coordinada.
Tras la turbulencia camino a las PASO, el debate al interior de Juntos por el Cambio parece haberse ordenado o por lo menos se concretaron bastas señales en ese sentido. La reunión que mantuvieron las fórmulas que compitieron el 13 de agosto, en el Jardín Botánico, luego de que Bullrich se impusiera por más de 5 puntos por sobre Larreta y conquistara la representación de la coalición formó parte de esa intención.
Desde ese entonces, la exministra de Seguridad trabaja para retener los votos moderados del espacio.