Un jinete le pegó un rebencazo a un hombre durante la Cabalgata de la Fe a la Difunta Correa que se llevó a cabo en la localidad sanjuanina de Caucete y la víctima debió ser hospitalizada, mientras que señaló que se salvó de milagro, ya que cayó a una cuneta pero, por poco, no se estrelló contra el cordón.
Según informaron los medios de San Juan, el hombre agredido es Nicolás Astudillo, integrante de la agrupación «El Cencerro», quien relató que el grupo que lo atacó estaba molestando a su sobrinas que eran parte de la cabalgata, a la vez que dijo que reconoció a su agresor y radicó la denuncia en la Comisaría 9º.
«El problema es que estos muchachos venían tomando de más (alcohol) y en las filas ya venían molestando a la gente. Algunos de ellos empezaron a chocar y empujar a mis sobrinas, que tienen 11 y 12 años y, a caballo, iban a cumplir una promesa. Se las llevaban por delante y querían tirarlas al piso. Lo hicieron tres veces: a la primera, les advertí de buena manera que dejaran de empujar, la segunda con un tono más fuerte y a la tercera, ya empezamos a discutir con insultos», relató en diálogo con radio Sarmiento.
En tanto, contó que, tras ello, con sus sobrinas decidieron adelantarse en la cabalgata para que no los molestaran más, pero, al llegar a Caucete, otra vez hubo enfrentamientos. En esta localidad, explicó que los grupos daban una vuelta completa para que los viera la gente que estaba allí y manifestó: «Como nosotros veníamos adelante y ellos, mucho más atrás, no dieron la vuelta completa. Se cruzaron de carril y nos esperaron».
«Allí, primero se encuentran con mi cuñado, papá de las nenas. Lo bajaron para agredirlo y decido meterme en el medio. Al hacer eso, me pegan un rebencazo en la cabeza y me caigo de la yegua en la que andaba. En el piso, veo a mis sobrinas que empiezan a correr y yo las sigo. El que me pegó, también salió tras ellas».
Astudillo señaló que se incorporó y salió corriendo para reunir a sus sobrinas en un solo lugar y reveló: «Cuando salgo corriendo, viene este jinete y de atrás, me choca con el caballo y me da un talerazo. Caigo a la cuneta pero cuando me levanté, me descompuse».
«En el hospital César Aguilar nos asistieron a mi cuñado y a mí. Esto podría haber sido una tragedia; si me hubiera golpeado contra el cordón de la cuneta, hubiera sido peor», aseveró. (NA)