
Luego de la primera jornada en el juicio por la muerte de Maradona, Rodolfo Baqué, el defensor de Almirón, charló con radio Colonia y reiteró que «hubo un plan criminal para matar» al ex futbolista de Boca, pero que su cliente no participó porque fue contratado para que formara parte de un tratamiento psiquiátrico: «Él cumplió».
«Almirón recibía órdenes médicas de Luque y Cosachov. Le dio las pastillas psiquiátricas a Maradona», explicó Baqué, quien también asesora a Gisela Madrid, la otra enfermera que irá a un juicio por jurados populares.
En este sentido, el abogado resaltó que en los tres días anteriores al deceso «hubo otro enfermero» en la casa del country de Tigre y que no estuvieron Almirón y Madrid, por lo que calificó de «ridiculez» que Luque, Cosachov y el psicólogo Carlos Díaz responsabilicen a su cliente.
Por su parte, Baqué dijo que Dalma Maradona, Fernando Burlando, Mario Baudry -el abogado de Diego Fernando-, Verónica Ojeda y la Fiscalía solicitaron que continué con la representación legal de Almirón, situación que se debatirá mañana en la segunda audiencia en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°3 de San Isidro.
«Lo importante en este juicio es saber quién mató a Maradona, no Baqué. Baqué es un cuatro de copas, papafrita», insistió, y añadió: «Quieren que me vaya porque defiendo a Madrid en otro juicio».
Por último, reveló que Almirón confía mucho en él: «Me dijo que Dios me puso en su camino. Está contento de que lo defienda».