María Laura Illesca, ex tesorera del Municipio de Cipolletti, enfrenta las consecuencias legales de su participación en actos de «defraudación a la administración pública y peculado», tras aceptar su responsabilidad en un procedimiento abreviado llevado a cabo este miércoles. La sentencia dictaminó dos años de prisión, con posibilidad de cumplimiento condicional, y una inhabilitación de por vida para ocupar cargos públicos. La resolución también otorga al municipio la facultad de reclamar el dinero sustraído a través del fuero contencioso administrativo.

En el marco del procedimiento abreviado, la querella representante de la Municipalidad de Cipolletti, la fiscalía y la defensa concordaron en la aceptación de la culpabilidad por parte de Illesca, así como en la calificación legal del delito y la pena asociada. La condena de dos años de prisión, sujeta a cumplimiento condicional, refleja la gravedad de los cargos imputados.

Además de la pena de prisión, la ex tesorera fue inhabilitada de manera vitalicia para ejercer cargos públicos. La decisión del Concejo Deliberante de destituirla de su posición como tesorera y la reciente exoneración por parte de la junta de disciplina comunal subrayan la severidad de las repercusiones.

La modalidad de «robo hormiga» que llevaba a cabo Illesca consistía en realizar transferencias de cuentas municipales a otra cuenta, de la cual ella misma era co-titular, aprovechando su posición y conocimiento técnico adquirido durante su extensa trayectoria en la administración pública.