El acusado Maicol E. Tapia fue sentenciado a prisión perpetua por el femicidio de Carina Barros Méndez ocurrido el 26 de octubre de 2023, en Buta Ranquil. El hombre ya había aceptado su responsabilidad en el hecho en una audiencia cuando la fiscalía, representada por el fiscal jefe Fernando Fuentes y la fiscal del caso Natalia Rivera, presentaron las pruebas en su contra. El imputado, tras finalizar la audiencia, pidió disculpas a la familia de la víctima.

El acuerdo de responsabilidad de Tapia fue homologado por la jueza de garantías Leticia Lorenzo, con el consentimiento de la abogada querellante que representa a la familia de Carina Barros Méndez.

El crimen fue calificado como femicidio triplemente agravado, por el vínculo, la violencia de género y la alevosía con la que fue cometido. La responsabilidad de Tapia en el femicidio nunca estuvo en discusión ya que fue el mismo acusado quién admitió su responsabilidad.

Tras acordar que era responsable del femicidio se realizó otra audiencia para establecer el monto de la pena, aunque se presumía que iba a ser de prisión perpetua debido a que es la única prevista para el delito que cometió. Hasta ese momento estuvo cumpliendo prisión preventiva.

La noche del asesinato, Tapia ingresó al domicilio de Carina mientras ella se encontraba sola, ya que su padre y hermano habían salido hacia un incendio cercano, advertidos previamente por el propio acusado. En la vivienda, Tapia rompió el celular de la víctima y comenzó a agredirla.

Carina intentó huir hacia la habitación de su hermano, ubicada en la parte exterior de la casa, pero fue alcanzada y apuñalada, sufriendo heridas fatales. La relación entre Tapia y Carina había durado alrededor de tres años, marcados por episodios de violencia de género.

El caso de Carina es uno de los tantos femicidios que golpean a la sociedad argentina, y su resolución busca no solo justicia para la víctima, sino también visibilizar la lucha contra la violencia de género en el país.