Continúa la búsqueda de justicia por Matías Rosales, el neuquino asesinado en Oruro, Bolivia, la semana pasada. Su mamá, Carina, continúa con las gestiones en ese país y habló con Canal 7 para confirmar el traslado los restos de su hijo, nuevamente su ciudad natal.
El cuerpo de Matías fue cremado este miércoles y el viernes 29 de septiembre sus restos viajarán -junto a sus familiares que se encuentran en Bolivia-, en un vuelo desde Salta hacia el aeropuerto de Neuquén. Sin escalas, se espera que arriben al aeropuerto Presidente Perón aproximadamente a las 17 horas.
«Mi hijo era hermoso y solidario, por favor no se olviden de él. Estamos solicitando que por favor la justicia haga un identikit antes de que nos vayamos», declaró Carina ante la prensa.
Florencia, la compañera de Matías, también declaró y aclaró que no tienen «nada en contra de ningún ciudadano boliviano ni de otro país», y precisó que lo único que piden es «justicia, y una mejora de la burocracia, el accionar judicial, y de salud para que nadie más pase por esto». Por último, aseguró que no le desea a nadie lo que está pasando, agradeció «a cada persona que se solidariza» y pidió «si hay algún testigo, que se haga presente porque puede ayudarnos mucho».
Matías viajaba por Latinoamérica con su Florencia, cuando recibió una puñalada en el pecho que le quitó la vida, luego de una extensa agonía en la que, además, le negaron atención hospitalaria según denunció su novia.
Integró la organización Ni Un Pibe Menos por la Droga en Neuquén y formó parte de los talleres en la Casa de Atención y Acompañamiento Comunitario (CAAC) del barrio Confluencia, donde daba talleres de guitarra y batucada.