El ataque ocurrió el domingo por la mañana, cerca de las 9, cuando ese centro comunitario no contaba con personal de vigilancia y antes de que abriera sus puertas a los vecinos.
«Realmente esto supera el vandalismo, gracias a Dios no había nadie adentro del salón”, evaluó el secretario de seguridad del municipio Cristian Tracana quien informó que contaron cerca de 70 piedras de gran tamaño en el lugar.
Tracana contó que la persona que realizó este ataque es un vecino de la zona, mayor de edad, y aseguró que desconocen el porqué de su accionar. «Suponemos que estaba bajo los efectos de alguna sustancia.
Fue demorado por la fuerza ya que ni con la Policía frenaba», destacó.
La Municipalidad realizó el mismo domingo las denuncias correspondientes por los daños y por la resistencia a la autoridad. Evaluaron que cambiar los vidrios rotos costará entre 300 y 350 mil pesos.