El sábado fue un día negro en el calendario para los ciudadanos y residentes de Israel; por la mañana comenzó el ataque mas sangriento ocurrido en ese territorio de los últimos tiempos. En entrevista con Radio 7, desde el sur de Israel, la neuquina Daniela Zerahia, que vive allí con sus tres hijos desde 2020 dijo que «Fueron y son días muy duros, nosotros vivimos a 40 kilómetros, vía aérea de la Franja de Gaza y por eso no tenemos el riesgo de la lluvia de misiles, pero estamos en alerta por filtración de terroristas», explicó.

«Se calcula que un mínimo de mil terroristas  entraron a los pueblos  aledaños a la franja, entraron a las casas, y eso significa que secuestraron, desgollaron, acribillaron muchos civiles, alrededor de ciento cincuenta, niños, adultos, mujeres, hombres, soldados, y esa es la situación, hay más de mil muertos y más de tres mil heridos», señaló.

Respecto a la situación actual de la poblacíon la neuquina explicó que Israel declaró su estado de guerra, donde se activaron los protocolos y no se pueden realizar reuniones sociales, hay rutas cerradas, el aeropuerto permaneció cerrado 24 horas por la lluvia de misiles, no hay clases en los colegios y solo concurren al trabajo los esenciales, como los agentes de salud.

«Adultos y niños estamos todos en shock, con este dolor en el alma porque nunca nos imaginamos que podíamos llegar en esta situación. Los medios informan, la cantidad de muertos, de heridos y hasta hoy a la mañana Israel todavía tenía pueblos y partes de las ciudades tomadas por los terroristas palestinos».

Terroristas infiltrados

Sobre la particularidad del ataque, Daniela explicó que es diferente esta guerra porque es la primera vez que entran terroristas por aire y por tierra, «Fue realmente una sorpresa lo que pasó, porque hubo una lluvia de 2.000 misiles y en ese momento ellos hicieron toda la operativa para entrar por aire y por tierra y los muchachos que entraron, los terroristas, son todos chicos jóvenes, muy jóvenes, de 20 a 30 años que hicieron una masacre», detalló.

Por último, la neuquina desde Israel dijo que «Cuando hay misiles vos tenés órdenes de lo que hay hacer, generalmente cada casa tiene un refugio, que es una pieza de la casa con paredes de 50 centímetros de cemento y una puerta y ventana de hierro, entonces en un bombardeo de misiles te metes ahí, pero ahora en la situación nueva de infiltración de terroristas, te piden que te metas ahí y no sirve de mucho, porque los terroristas entran a la casa, abren todo y no tenes mucho que hacer», relató.