El papa Francisco afirmó que se siente «cercano» a la Argentina y que es «injusto» que se diga que no quiere visitar su país natal porque, destacó, una posible visita «sigue vigente».
Además reivindicó que está «haciendo política» porque es lo que tiene que hacer «el pueblo cristiano», sostuvo la necesidad de una «pata reguladora» del Estado en la economía y planteó que la primacía de las finanzas es «el problema económico más acuciante hoy».
«En la Argentina viví 76 años. Pero no estoy lejano, me siento cercano. Estoy siempre en contacto con muchos compatriotas amigos», planteó el pontífice en el libro «El Pastor» (Ediciones B), libro que repasa su primera década como pontífice, escrito por los periodistas Sergio Rubin y Francesca Ambrogetti. Los autores habían hecho en 2010 «El jesuita», la biografía del entonces cardenal Jorge Bergoglio.
«Y cuando escribo sobre valores, sobre doctrina social de la Iglesia, si bien lo hago para todos los países, tengo presente a mi país y espero que mis palabras puedan ser una contribución», agregó Francisco en el libro que se publica esta semana en la Argentina, en ocasión del décimo aniversario de su elección como Papa que se celebra el 13 de marzo.
«De todas maneras, el propósito de viajar a la Argentina sigue vigente. Es injusto decir que no quiero ir», sentenció en esa dirección.
Francisco planteó varias veces que su esperada visita a la Argentina estuvo cerca de hacerse en 2017, en una gira que incluiría también Chile y Uruguay, pero que el calendario electoral del país trasandino terminó por cancelar la planificación.