Estudiantes de la Universidad de Cipolletti han organizado una vigilia en repudio al veto de la Ley de Financiamiento Universitario, que ha suscitado protestas en diversas instituciones del país. La actividad, impulsada por el Centro de Estudiantes de Humanidades, se desarrolla en un contexto de creciente descontento por los recortes en el presupuesto destinado a la educación superior.
En diálogo con Noticias 7, Joaquín Berrud, presidente de la Federación Universitaria del Comahue (FUC), destacó que la vigilia es parte de un movimiento más amplio que se replica en más de 65 facultades a nivel nacional. “Hemos decidido llevar a cabo esta acción para visibilizar nuestro rechazo al veto de la ley”, afirmó Berrud, quien subrayó la importancia de la organización estudiantil en estos momentos críticos.
Durante la semana pasada, se realizaron asambleas en diversas unidades académicas para discutir el futuro de la educación universitaria. En Cipolletti, los estudiantes votaron para tomar la Facultad de Ciencias de la Educación y Psicología como parte de sus acciones de protesta, manteniendo el funcionamiento normal de las clases. “Queremos visibilizar sin obstruir el cursado de nuestros compañeros”, aclaró Berrud.
La vigilia culminará con una marcha hacia el Consejo Superior, donde se espera la participación de representantes de todas las facultades de la región. “Buscamos unificar nuestras demandas y construir un frente común que presione al gobierno por un presupuesto justo”, dijo el dirigente estudiantil.
El descontento no solo se limita a la falta de financiamiento, sino que también se extiende a la creciente preocupación por el futuro de las universidades públicas. Berrud explicó que el presupuesto 2025 que se está discutiendo no es suficiente para cubrir las necesidades básicas de funcionamiento. “El gobierno quiere destinar solo 3.8 billones de pesos, cuando la demanda es de al menos 7 billones”, afirmó.
Las asambleas realizadas en la universidad tienen como objetivo construir mandatos desde la base para llevar una posición unificada a las instancias de negociación. “Necesitamos que cada facultad participe en la construcción de nuestras demandas para que sean efectivas”, recalcó Berrud.
La situación actual pone en riesgo el acceso a la educación superior, especialmente para los estudiantes de sectores más vulnerables. “El recorte en el financiamiento afecta directamente a los que menos tienen, generando un vacío en la universidad pública”, advirtió el presidente de la FUC.
Finalmente, Berrud hizo un llamado a la comunidad educativa y a la sociedad en general para que se unan en defensa de la educación pública. “No podemos permitir que nuestras universidades se vacíen y que los estudiantes se vean obligados a abandonar sus estudios”, concluyó.
La vigilia y las protestas que se desarrollan en Cipolletti son solo una parte de un movimiento nacional que busca garantizar el futuro de la educación universitaria en el país. La comunidad educativa se mantiene atenta a los avances en la negociación y a la respuesta del gobierno ante sus reclamos.