El Gobierno nacional ha calificado como “inválida” la reciente reelección de Claudio “Chiqui” Tapia como presidente de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA). Esta afirmación fue realizada por el inspector general de justicia, Daniel Vítolo, quien consideró que la convocatoria a elecciones fue “irregular e ineficaz”.
Según Vítolo, la asamblea de la AFA solo tenía validez para tratar ciertos puntos administrativos, como la aprobación de “estados contables y el presupuesto de gastos para 2025”, pero no para la designación de Tapia ni para adelantar los comicios internos que estaban programados para 2025.
El inspector dejó claro que “el resto de los puntos están invalidados” por una resolución de la Inspección General de Justicia (IGJ). Vítolo argumentó que la AFA se encuentra en una “posición política” debido a la falta de fundamentos jurídicos que respalden su reciente decisión.
Durante su discurso en la asamblea, Tapia presentó su postura, a la que Vítolo respondió contundentemente, afirmando que las acciones del presidente de la AFA no se alinean con la resolución de la IGJ. El inspector puntualizó que “el Código Civil y Comercial, el Estatuto de la AFA y su reglamento electoral impiden adelantar la elección”, lo que refuerza la invalidez del proceso.
Desde un punto de vista técnico, Vítolo criticó que la asamblea no podía modificar el estatuto mientras existieran reformas pendientes de inscripción. Esto plantea serias dudas sobre la legitimidad del proceso de reelección de Tapia.
Además, Vítolo destacó que los fallos judiciales obtenidos por la AFA no legitimaban la realización de una asamblea para renovar autoridades, lo que ha llevado al Gobierno a preparar una ofensiva judicial contra el presidente de la AFA tras su reelección.
El inspector consideró que la elección de Tapia implicó una “desobediencia de autoridad”, aunque aclaró que la IGJ no tiene competencia para presentar una denuncia penal. Esta responsabilidad podría recaer en cualquier ciudadano o en la Procuración General del Tesoro.
En la asamblea, que se celebró con la presencia de 45 de los 46 miembros convocados, se aprobó de manera unánime la reelección de Tapia hasta el año 2028, junto con la anulación de los descensos de la Liga Profesional de Fútbol, creando un torneo de 30 equipos para 2025.
La situación se complica aún más, dado que Tapia enfrenta un conflicto con el gobierno de Javier Milei y con Mauricio Macri, quienes impulsan la transformación de los clubes en sociedades anónimas deportivas (SAD). Vítolo reiteró que las irregularidades en la asamblea no son una cuestión política, sino que obedecen a la falta de cumplimiento de los procedimientos legales.
