En un trágico accidente ocurrido este martes pasado el mediodía, un joven policía de 23 años resultó gravemente herido al recibir un disparo accidental mientras se encontraba junto a un compañero en una vivienda de calle Belgrano al 4.400. ambos policías estaban manipulando sus armas reglamentarias realizándole las tareas de limpieza.
El hecho sucedió mientras los dos jóvenes policías, pertenecientes a la fuerza provincial, limpiaban sus armas Bersa Thunder, tarea que forma parte de su entrenamiento básico. A pesar de estar entrenados en el uso y cuidado de sus armas, el accidente se produjo debido a una maniobra incorrecta en la que uno de los oficiales tocó una pieza indebida de su arma, la cual se encontraba cargada en ese momento.
El disparo impactó en el rostro de la víctima, presumiblemente en el sector de la boca, lo que generó una rápida respuesta de su compañero, quien notificó de inmediato a los servicios de emergencia. El personal del SIEN (Sistema Integrado de Emergencias del Neuquén) se presentó en el lugar y trasladó de urgencia al herido al Hospital Castro Rendón.
Actualmente, el joven policía se encuentra internado en estado delicado, y los médicos continúan con su asistencia. Se espera más información sobre su evolución en las próximas horas, mientras la situación mantiene en alerta a sus colegas y familiares.
En las últimas horas se supo que el disparo le ingresó por uno de sus hombro. Se le iba a practicar una tomografía computada para establecer el trayecto del disparo y cómo le afectó. El paciente manifestó a los médicos que no sentía sus piernas y tampoco uno de sus brazos.
El caso ha generado un fuerte impacto dentro de la fuerza policial, donde si bien los efectivos reciben capacitación tanto en el uso como en el mantenimiento de sus armas, este incidente demuestra la posibilidad de error humano. “Todo ser humano puede errar”, señalaron fuentes cercanas a la investigación, recordando la importancia de las medidas de seguridad en todo momento.
La policía provincial ha iniciado una investigación interna para determinar con exactitud las causas del accidente y evaluar las responsabilidades que puedan surgir del hecho. Por el momento, no se han brindado declaraciones oficiales más allá del estado de salud del joven herido.
Este tipo de accidentes, aunque poco frecuentes, refuerzan la necesidad de mantener rigurosos protocolos de seguridad durante el manejo de armas de fuego, tanto en servicio como fuera de él.
