Luego de la sentencia condenatoria a los ocho rugbiers por el crimen de Fernando Báez Sosa, los fiscales de la causa manifestaron estar «muy conformes» con la decisión del Tribunal pese a que tres de los acusados recibieron menos años de cárcel.
«Estamos muy conformes porque el Tribunal entendió que hubo alevosía y premeditación», sostuvo Dávila, quien también insistió que siguen «convencidos de que todos son coautores».
Asimismo, señalaron que van a ir a Casación para refutar el pedido de condena de los ocho imputados que es de prisión perpetua: «Tengo que leer los fundamentos, no me quiero adelantar».
Con relación a la descompensación que sufrió Máximo Thomsen, luego de enterarse la condena por parte del Tribunal, el fiscal Dávila expresó: «Es una cuestión lógica lo que le pasó a Thomsen. La vida cambió para todos».
Por último, sobre lo que ocurrirá con el futuro de los jóvenes tras el conocimiento del veredicto, el fiscal explicó: «Todavía no quedó firme la sentencia, recién ahí se sabrá donde serán reubicados los imputados».
Tras la breve jornada, el Servicio Penitenciario trasladó a los detenidos directamente hasta el penal de Melchor Romero, donde estuvieron alojados a la espera del juicio. Después de que quede firme la sentencia, existe la posibilidad de que los acusados sean separados.
Los rugbiers Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Ciro y Luciano Pertossi fueron condenados a la pena de prisión perpetua por ser coautores del delito de homicidio doblemente agravado de Fernando Báez Sosa. En tanto, Ayrton Violazz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi recibieron una condena de 15 años de prisión por ser partícipes secundarios y lesiones leves.