La inflación de abril llegó al 4,9% anual en los Estados Unidos y marcó la décima baja mensual consecutiva. La Oficina de Estadísticas Laborales del Gobierno de ese país informó este miércoles que los precios al consumidor subieron 0,4% durante el mes pasado, mientras que, en los últimos doce meses, trepó al 4,9% (contra el 5% que había registrado en marzo).
Según las estadísticas oficiales, el índice de vivienda fue el que más contribuyó al incremento mensual, seguido del índice para los autos usados y los combustibles. Por su parte, el índice de precios de la energía subió un 0,6% en abril, mientras que el valor medio de los alimentos se mantuvo sin cambios, al igual que en marzo, aunque eso fue resultado de un descenso del 0,2% de los precios de la compra y un incremento del 0,4% en las comidas en restaurantes.
El IPC núcleo subió en abril un 5,5% (una décima menos que en marzo), señaló además el Gobierno.
En los Estados Unidos, la inflación llegó a tocar el 9,1% en junio del año pasado, su nivel más alto en cuatro décadas, impulsada por las subas en los combustibles.
Para contener los precios, la Reserva Federal (FED) ha subido en cinco puntos los tipos de interés en poco más de un año; con eso enfrió la economía, que creció apenas 0,3% en el primer trimestre de 2023. La semana pasada se aplicó la hasta ahora última suba, que fue de 25 puntos básicos, llevando la tasa de interés al rango de 5% y 5,25%, su mayor nivel desde 2007.
Los inversores dudan sobre si la FED pondrá una pausa en su política de subir tasas o bien, la decisión de hace siete días será el último ajuste en el actual ciclo de contracción monetaria.