Carina, la mamá de Matías Rosales -el neuquino asesinado en Bolivia- brindó una conferencia de prensa este lunes en Neuquén para contar los avances del caso y convocar a una marcha. La actividad está programada para el jueves a las 18, en el monumento a San Martín.

La mujer explicó que recibió mucho apoyo por parte del gobierno nacional, provincial y municipal, así como de parte de la embajada pero no así de las autoridades bolivianas. En ese sentido aseguró que viajará nuevamente la semana que viene y se incorporará como querellante.

«La lucha es continua con el sistema de justicia», explicó la mujer al móvil de Canal 7 y recordó que «cuándo pasó lo de Matías, la policía no se hizo presente para recabar información y cotejar datos sobre el colombiano». Además insistió en que Matías llegó al hospital con signos vitales y no lo atendieron.

Natalia, su hermana, hizo especial énfasis en el destrato que recibieron Matías y Florencia luego del ataque. «Cuando pidieron ayuda en la farmacia, la farmacéutica les dijo que salgan de la vereda porque la estaban manchando con sangre», contó. «Lo discriminaron por ser migrante, por ser artesano, y por su forma de vida», insistió.

La Policía de Bolivia detuvo a un hombre con características similares pero Florencia, la pareja de Matías, desestimo el encuentro y aseguró que no se trata del colombiano que habría asesinado a su novio.

«No hicieron siquiera un identikit, no consultaron a Florencia sobre las características del colombiano», criticó Carina y amplió que «la investigación comenzó dos días más tarde y él pudo haber salido del país».

Foto: Oscar León.