Esta vez, el incidente involucra al piloto Leonel Pernía, cuyo vehículo fue objeto de un ataque a balazos, un episodio que impactó a la familia deportiva.
Las versiones apuntaron a un conflicto con José Manuel Urcera, marido de la modelo Nicole Neumann.
La familia Urcera, conocida por su estilo de vida y sus conexiones con el sector petrolero, ha estado en el ojo público últimamente no solo por sus lujos sino también por su implicación en sucesos polémicos.
El más reciente involucra a José Manuel Urcera en un altercado físico, lo que ha levantado más sospechas sobre la naturaleza de las actividades de la familia.
El incidente con Pernía se produjo poco después de su victoria en una carrera importante. El piloto descubrió que su vehículo había sido baleado, un hecho que generó conmoción y repudio en el ambiente del automovilismo.
Un posteo en la red social X del periodista Sebastián Dumont prendió las luces: “Las mafias llegan también al automovilismo. Le balearon el auto a Leonel Pernía, y fuentes muy cercanas al episodio le apuntarían al resultado de una discusión con José Manuel Urcera el marido de Nicole Neumann donde habría habido injerencia de su padre, Claudio, empresario petrolero en Neuquén y Río Negro. Acaba de salir comunicado -lavado- de la categoría Turismo Nacional”.
La Asociación Pilotos Automóviles Turismo (APAT) expresó su preocupación y se ha comprometido a colaborar con las autoridades para esclarecer los hechos.
Este suceso pone en perspectiva la creciente preocupación por la seguridad y la integridad en el deporte automovilístico. La gravedad del ataque a Pernía no sólo plantea interrogantes sobre las rivalidades dentro del circuito, sino que también destaca la urgente necesidad de abordar la violencia.