La vicepresidenta Cristina Kirchner recibió hoy a la vicepresidenta electa de La Libertad Avanza, Victoria Villarruel, en su despacho del Senado para comenzar la transición en ese cuerpo legislativo..
La diputada nacional que asumirá como vicepresidenta el 10 de diciembre ingresó muy puntual a la Cámara alta por la calle Combate de los Pozos acompañada por tres colaboradores, y fue recibida por la vicepresidenta en ejercicio en un encuentro que duró menos de una hora y que no registró fotos.
Durante la reunión se coordinó la organización de la Asamblea Legislativa del 10 de diciembre y se repasaron los principales hechos de la gestión, según comunicaron fuentes cercanas a Cristina Kirchner.
«Es una reunión histórica para todos los argentinos», dijo Villarruel al tomar contacto con la prensa apenas finalizada la reunión, de cual se fue muy conforme.
La diputada de La Libertad Avanza también calificó el encuentro como «muy cordial» y adelantó que va a «trabajar muy intensamente todo el verano» con todos los bloques para sacar las leyes que envíe el Poder Ejecutivo.
En este sentido, cae de maduro que una vez en funciones, Milei va a convocar a sesiones extraordinarias del Congreso.
«Fue una reunión cordial donde hablamos de la transición que va a ser ordenada, respetuosa. La persona que (Cristina Kirchner) ha designado para ordenar la transición nos ha explicado el funcionamiento del Senado y los pasos a seguir en los siguientes días», explicó Villarruel.
La vicepresidenta electa comentó que «ha sido todo dentro d los democrático, de lo cordial, del esfuerzo de ambas partes de tratar de llevar adelante una transición que sea en beneficio del pueblo argentino».
«Fue una charla amable , no nos conocíamos , pero pudimos conversar, pudimos conocernos, hablar de las cuestiones que hay por delante», ponderó.
«No hubo fotos pero la ciudadanía tiene que quedarse sumamente tranquila porque vamos a llevar adelante desde La Libertad Avanza y de la gestión saliente una transición ordenada en el Poder Legislativo», agregó.
Los próximos pasos serán la asunción de los senadores electos en una sesión con fecha no confirmada, luego la Asamblea Legislativa del 10 de diciembre para la asunción de la fórmula presidencial y la designación de las nuevas autoridades de la Cámara alta.
De acuerdo a lo informado por fuentes de la presidencia del Senado, durante el encuentro con Villarruel la vicepresidenta destacó que al asumir la gestión se recibió la obra social del personal legislativo (DAS) con $390 millones de déficit mensual y que luego del proceso de saneamiento y mejoras en la gestión se logró un superávit equivalente a 5 meses de prestaciones, ampliando al mismo tiempo los servicios y prestaciones para los afiliados.
Cristina Kirchner también le comentó que en cuanto a los recursos humanos del Senado en la actualidad la cámara alta cuenta con una nómina de 400 empleados menos que la gestión anterior.
También le hizo un repaso a su sucesora sobre el estado de los avances y mejoras edilicias que se llevaron adelante durante la gestión, «con el objetivo de poner en valor los espacios de valor patrimonial y mejorar los espacios de trabajo del personal del Senado».
La reunión había sido coordinada por la secretaria Administrativa del Senado, María Luz Alonso, quien por instrucciones de Cristina Kirchner se puso en contacto con el diputado electo Guillermo Montenegro, uno de los hombres del círculo de mayor confianza de Villarruel, para acordar el día y la hora de la audiencia.
El encuentro protocolar generaba una fuerte expectativa por las notorias diferencias ideológicas entre la vicepresidenta en ejercicio y su sucesora en el cargo.
La cumbre de vicepresidentas se produjo un día después de que el presidente saliente, Alberto Fernández, recibiera a Milei en la Quinta de Olivos, donde mantuvieron un intercambio que el líder de La Libertad Avanza calificó de «muy productivo» y «cordial».
Cristina Kirchner decidió promover el encuentro con Villarruel luego de suspender un viaje a Nápoles, Italia, donde tenía previsto encabezar una clase magistral en una universidad sobre la «insatisfacción democrática». También existía la posibilidad de una audiencia con el Papa Francisco en el Vaticano, aunque dicha cita nunca llegó a confirmarse.