En su debut como local por la CONMEBOL Libertadores, River se impuso por 4 a 2 ante el Sporting Cristal de Perú en un gran partido plagado de emociones.
El traspié en el debut ante The Strongest obligaba al Millonario a vencer en el Monumental para acomodarse en la zona y llegar al próximo duelo con Fluminense, en Río de Janeiro, sin urgencias. Eran tres puntos clave y para eso Martín Demichelis puso lo mejor que tenía en cancha.
Pero apenas habían pasado cinco minutos del inicio y la historia comenzó complicarse con el cabezazo de Da Silva Oliveira, que aprovechó una desconcentración de la defensa local y puso en ventaja al Cristal.
La buena noticia para el Millo fue la rápida reacción del equipo, que salió a buscar el empato y arrinconó al rival contra su arco.
Sin desesperarse, confiando en su juego, Enzo Pérez, Nacho Fernández y Esequiel Barco se adueñaron del mediocampo. Fue cuestión de tiempo que llegará la igualdad y apareció luego de una gran jugada colectiva, que selló De la Cruz de cabeza.
Desde entonces Sporting Cristal no tocó la pelota durante más de 25 minutos. Todo fue de River, que empujó al equipo peruano y no le dio respiro.
Las jugadas claras se acumularon una tras otra y fue Esequiel Barco el que logró transformar el dominio en gol. 2 a 1 y hasta aquí estaba todo dado para una fiesta Millonaria, una gran remontada con buen nivel de juego… pero un error complicó la noche.
Enzo Díaz pegó desde atrás para evitar lo que parecía ser un gol seguro del Sporting Cristal y se fue expulsado. La apuesta no salió bien, Washington Corozo la clavó al ángulo y River se fue al descanso con un inesperado 2 a 2.
En su debut como local por la CONMEBOL Libertadores, River se impuso por 4 a 2 ante el Sporting Cristal de Perú en un gran partido plagado de emociones.
El traspié en el debut ante The Strongest obligaba al Millonario a vencer en el Monumental para acomodarse en la zona y llegar al próximo duelo con Fluminense, en Río de Janeiro, sin urgencias. Eran tres puntos clave y para eso Martín Demichelis puso lo mejor que tenía en cancha.
Pero apenas habían pasado cinco minutos del inicio y la historia comenzó complicarse con el cabezazo de Da Silva Oliveira, que aprovechó una desconcentración de la defensa local y puso en ventaja al Cristal.
La buena noticia para el Millo fue la rápida reacción del equipo, que salió a buscar el empato y arrinconó al rival contra su arco.
Sin desesperarse, confiando en su juego, Enzo Pérez, Nacho Fernández y Esequiel Barco se adueñaron del mediocampo. Fue cuestión de tiempo que llegará la igualdad y apareció luego de una gran jugada colectiva, que selló De la Cruz de cabeza.
Desde entonces Sporting Cristal no tocó la pelota durante más de 25 minutos. Todo fue de River, que empujó al equipo peruano y no le dio respiro.
Las jugadas claras se acumularon una tras otra y fue Esequiel Barco el que logró transformar el dominio en gol. 2 a 1 y hasta aquí estaba todo dado para una fiesta Millonaria, una gran remontada con buen nivel de juego… pero un error complicó la noche.
Enzo Díaz pegó desde atrás para evitar lo que parecía ser un gol seguro del Sporting Cristal y se fue expulsado. La apuesta no salió bien, Washington Corozo la clavó al ángulo y River se fue al descanso con un inesperado 2 a 2.
Las emociones no mermaron en el segundo tiempo. Demichelis movió el banco. Aliendro, Herrera y Pablo Solari saltaron a la cancha y, con uno menos, el Millonario volvió al ritmo arrollador. Barco, con un cañonazo potente, puso la noche en orden y luego Pablo Solari, con una deliciosa definición marcó el 4 a 2. Ahora sí la gente respiraba tranquila.
Derrumbado, Sporting Cristal pasó a deambular por la cancha sin generar peligro en el arco de Franco Armani y River descansó aprovechando el dominio y hasta con chances claras para marcar el quinto.
La noche había empezado torcida pero terminó con una gran fiesta Millonaria que ilusiona de cara al futuro.