«En la fogata de San Juan se va lo malo y llega lo bueno», dicen. Por la tarde noche de este viernes vecinos del Alto Valle se reunieron en barrio Río Grande de Neuquén Capital para festejar nuevamente esta tradición con más de 30 años de historia. La celebración se realizó en calle Domene al 280 y cerró con una gran choripaneada «para todos los presentes», explicó María José, una de las organizadoras.

Del evento participaron vecinos de todas las edades. Entre ellos, alumnos de algunas escuelas primarias de la capital, quienes fueron los encargados de armar el muñeco que se coloca encima de la fogata. También participó una murga local y personal de Bomberos, Tránsito y Policía.

Tradicionalmente la fogata se incendia el 23 de junio de cada año, pero debido a las lluvias intensas de esa fecha, el festejo se postergó para este viernes. En calle Domene de la capital, allí, se congregó una gran cantidad de vecinos para incendiar simbólicamente sus males y recibir los buenos augurios.

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