Este martes por la noche un criancero fue encontrado muerto a unos 15 kilómetros del paraje Taquimilán Arriba. Según se pudo conocer, el puestero, de nombre Carlos Aravena de unos 70 años, era intensamente buscado en las últimas horas del martes.
Los animales habían regresado solos al puesto de invernada y desde allí comenzó la preocupación por el destino del criancero. Finalmente cerca de la medianoche fue encontrado sin vida en el paraje conocido como El Manzano por otro arriero de apellido Troncoso (que sería vecino de veranada). De inmediato se le dio intervención a la Policía y este miércoles se realizarán las pericias de rigor para determinar las causas del deceso.
Aravena, querido y reconocido criancero de la región, tenía su veranada en el Cajón de Moncol en la zona del Paso Pichachén. Hace años había vendido todas las chivas ya que trabajaba solo en el campo. Por esta razón solo conservaba el ganado vacuno. Todos los años cumplía con el ritual de la trashumancia que le demandaba entre 5 y 6 días para recorrer de ida y vuelta de su veranada hasta su invernada en Taquimilán Abajo.