En la jornada del lunes, personal del área de Comercio de la Municipalidad de Neuquén le «levantó» el puesto de frutas y verduras a una mujer que tiene su puesto ambulante en la rotonda de Casimiro Gómez. En el lugar son varias las familias que utilizan el sector para venta ambulante.
Esta mañana, la subsecretaria de Comercio, Gabriela Cagol, en diálogo con Radio 7, explicó que “En el día de ayer, se notificó a estas personas que estaban desarrollando la actividad sin ningún tipo de autorización, que debían dejar de desarrollar esa actividad y que tenían que retirar las estructuras. En ese momento retiraron sus pertenencias. Todo lo que habían armado se procedió a desarmarlo, se le informó que lo iba a hacer la municipalidad”.
“Hoy por la mañana, personal de la municipalidad se acercó para desarmar las estructuras y se dio una situación de agresión hacia el personal que estaba trabajando. Lo cierto es que desde el área se viene trabajando en lo que es el control del espacio público, los vendedores ambulantes en distintos sectores. Y está totalmente prohibido instalar este tipo de estructuras más en el sector de la autovía por el riesgo que implica no solo sanitario, que no tienen ningún control, sino también en relación con la circulación vehicular que hay en la zona”, agregó Cagol.
Por su parte, María, la vendedora ambulante que vende frutas y verduras en el sector, también en diálogo con Radio 7, explicó que, “ayer ellos vinieron a quererme sacar toda la mercadería, me dio bronca y después levanté mi mercadería y me fui pacíficamente. Me mandaron a una dirección para darme el permiso. Allí, me dieron un número, llamo y dice que hoy me iban a llamar, pero no me dieron respuesta. Esta mañana, me avisaron los vecinos que me rompieron el puesto, me dolió porque cada palito que puse me costó. No le pido planes, solo trabajar. No les costaba nada darme el permiso”.
María contó que “son muchas las personas que trabajan acá, tal vez no como yo arme, yo no quiero que me regalen nada. Acá nos establecimos y nos quedamos. Voy a volver a ir a ver si me puede dar el permiso en Comercio”.
Desde Comercio desmintieron que la mujer fue agredida, “lo desmentimos totalmente. El personal de la municipalidad estaba procediendo con lo que es desarmar las estructuras que había con palos, lonas y demás. No era una construcción, sino algo precario, y comenzaron personas que estaban en la zona a arrojar piedras a la persona que estaba trabajando”.