A través de una denuncia del Banco Patagónico de Alimentos, se realizó un allanamiento a luego de la investigación realizada por el departamento de Delitos Económicos.
La intervención fue el martes a las 18 en una vivienda particular del oeste neuquino. Allí se recuperaron más de 50 litros de yogurt que estaban destinados a un merendero donde asisten personas en situación de vulnerabilidad.
Los sachets fueron retenidos, sin que se le cortara la cadena de frío y devueltos al Banco Patagónicos de Alimentos para que pueda redistribuirlo.
El subcomisario Gerardo Oviedo, de Delitos Económicos, explicó en Radio 7 que la investigación se llevó adelante con el seguimiento de publicaciones en redes sociales, dónde se vendía el producto a un bajo precio con la aclaración que el yogurt se acercaba a su fecha de vencimiento. Una vez que se pudo constatar su origen, identificaron la casa y procedieron con el allanamiento donde detuvieron a dos personas, una de ellas con antecedentes.
Los sachets fueron adquiridos por el Banco de Alimentos en la campaña que lleva adelanta la ONG en convenio con supermercados, quienes donan alimentos cercanos a la caducidad, pero que aún son consumibles, y son destinados a comedores y merenderos.
El Banco se encarga de hacer un seguimiento a los insumos repartidos para poder garantizar, no solamente la llegada en condiciones, sino que además asegurarse que se destine correctamente.